DANZAHORA celebró sus 22 años de vida artística remarcando su sello artístico enfocado en lo cotidiano del diario vivir.
Con el montaje “PRESENTE”, la Compañía de Danza Contemporánea DANZAHORA celebró su vigésimo segundo aniversario, con un recorrido que llevó a la audiencia a revivir e identificar desde la danza, sentires, emociones y personalidades vinculadas a distintas etapas de la vida, desde los primeros años hasta llegar a la adultez. Esta actividad formó parte de la Programación Anual de la Academia Arte Motus, apoyada por el Programa de Apoyo a Organizaciones Culturales Colaboradoras PAOCC 2024, del Ministerio de las Culturas las Artes y el Patrimonio.
“Esta fue una apuesta a volver a lo cotidiano, recordar lo que era importante en mi infancia y adolescencia y que sin duda va cambiando de generación en generación. Además, estos tiempos locos de hoy nos exige reconocer personajes que son cotidianos y con los cuales debemos aprender a convivir”, así resume Troncoso lo que fue la función, quien resaltó que el sello artístico de la Compañía está dado en recrear a través de la danza, la poesía y la música, momentos comunes, actuales, que cada uno vive desde su individualidad y que muchas veces pasan inadvertidos.
Más de 60 bailarinas y bailarines, conformados por los elencos adulto y juvenil, acompañados por los distintos niveles del Área de Danza Contemporánea de la Academia Arte Motus de Puerto Montt y Los Muermos, se tomaron las tablas del Teatro Diego Rivera de Puerto Montt para invitar al público a reconocer a través del movimiento algún momento de su propia infancia y adolescencia, así como personajes comunes que encontramos en el día a día, emociones que no dejarán indiferente a la audiencia.
“PRESENTE» es un recorrido por fragmentos de nuestra historia que evocan sentimientos y emociones, que nos llevan a reencontrar lo que fue, es y será relevante en nuestro camino de vida. Es un montaje dedicado a la familia, donde las y los bailarines nos llevan a recordar los momentos importantes de nuestras vidas y ver en ellos cómo los sentires van cambiando, mutando y nos convierte en quienes somos hoy, en el presente”, concluye Troncoso.















